Mañanitas a spinning II

Seguimos saliendo alguna que otra mañana cuando el tiempo nos lo permite, en esta ocasión acompañado de Jose Manuel, un crack de esta modalidad del cual se aprende algo día trás día. La cosa no pintaba bien ya que las algas hacían acto de presencia al amanecer, justo en la zona donde habíamos estado sacando pescado en jornadas anteriores, total habría  que buscar alguna zona más protegida e intentarlo por arriba con señuelos de superficie. Tras probar en varios puntos sin tener resultado  desandamos el camino a la zona donde habíamos comenzado la jornada y en el camino decidimos parar al ver un par de pájaros tirarse al agua, en ese momento vimos boquerones saltando del agua, no tardamos ni un segundo en estar encima de las piedras dándole a la muñeca. Tras pocos lances Jose clava la primera de las dos buenas lubinas que salieron , dándole una picada preciosa a pocos  metros de nosotros. Tras trabajarla con maestría por su parte consigo meterla  en la sacadera observando como se retorcía brava como ella sola con un -skunk color caballa engullido en su tremenda bocaza. La jornada discurrió con algunas picadas fallidas y capturas de escaso porte, y es que los peces estaban muy desconfiados con unas aguas tan claras a pesar de algunas algas por el fondo. Tras una persecución  de una buena lubina que no tomó el señuelo y tras un enganche en las piedras que me rozó el bajo, decido cambiarlo y afinar un poco más para ver si recelaban menos, monté un bajo de  Magic fluorocarbono 100% (Nou Cast) del 0.28 y un paseante demoledor, el Gunfish 115, en el primer lancé entró otra hermosa lubina clavadita a la de Jose que trás una hermosa pelea pude ponerla en seco. Tras esta picada decidimos dar por concluida la jornada con un buen sabor de boca en ambos, al comprobar que los nuevos materiales funcionan bastante bien, que había peces en el agua, que habíamos sido capaces de engañarlos  y que habíamos disfrutado de una buena mañana de sol con la mejor compañía posible. Hasta la próxima.

Mañanitas a Spinning 1ª Entrega

Inauguro esta sección del blog con esta entrada titulada "Mañanitas a Spinning"  ya que es la modalidad que estoy utilizando últimamente, debido a la total ausencia de temporales , aguas y vientos propicios para buscar en la espuma a las especies reinas del surfcasting invernal, así que mientras sigan soplando vientos de tierra y las aguas sigan claras, las varas largas seguirán reposando en su cálido rinconcito a la espera de vendavales y noches bajo cero.

En esta sección iré publicando el resultado de las jornadas dedicadas a esta nueva modalidad para mí, la cual llevo practicando menos de un año y la que me tiene totalmente engolosinado, habiéndome deparado muy buenas capturas y haciéndome sentir unas sensaciones distintas a las experimentadas hasta ahora en cualquier otra modalidad.

 Lo que me tiene enganchado de la pesca con señuelos artificiales es la constante movilidad que requiere y la frenética actividad de los peces cuando das con el momento oportuno, habiendo asistido incrédulo a verdaderos espectáculos como son las pajareras ( misiles en forma de albatros, cormoranes, charranes, y submarinos camuflados en lubinas, corvinas o anjovas), detalles que suelen pasar desapercibidos cuando nos apostamos en la playa a la espera de alguna picada. 

Por estos detalles, por la emoción de ver una picada en superficie a pez visto, por la posibilidad de ser uno el que "caza" al pez, y sobre todo por su deportividad al permitirnos soltar la mayoría de peces que no queremos llevarnos por no dar la talla moral; por todo esto encuentro en esta pesca un veneno como pocas tienen. ¡OJO! y aviso para el que quiera probar, si tiene cura yo aún no la he encontrado (o no la he buscado lo suficiente jaja).

Esperando que os guste esta sección os dejo con el resultado de una jornada a spinning en la que salieron muchos peces, muchísimos, pero que por su escasa talla (moral), ya que todos daban la ridícula talla mínima, fueron devueltos  a su medio, reservando éstas, las mejores capturas del día para deleitarnos en la mesa junto a la familia. En esta ocasión cogí pescado con casi todos los señuelos que utilicé, si bien las mayores entraron a primera hora utilizando paseantes.

 Al poco tiempo y tras observar la actividad que tenía delante mía y el trajín que me traía con la sacadera se acercaron varios pescadores, que armados con sus bombetas espantaron el pescado que estaba comiendo en superficie al lanzarlas encima del pescado y no unos metros más allá.

     Este fue engañado con un daiwa tournament, tras ser liberado de su engaño fué al agua de nuevo (Gracias Yeyo jejej)

No quedaba otra que seguir intentándolo por abajo, y en este caso fueron los vinilos los que se tornaron  auténticos protagonistas de la mañana, rebañando varios peces a escasos cm de las piedras en apenas 2 cuartas de agua ante la atónita mirada de los demás pescadores que al solo disponer  de raglous no pudieron sacar partido a esta preciosa mañana otoñal.

                                      Engañado gracias a un sandeel de Savagear

Y es que los peces son caprichosos y no siempre comen lo mismo, por eso deberemos llevar un buen arsenal en nuestra caja de señuelos para adaptarnos a todas las posibilidades que nos depare el día.

Sin más que añadir y deseando volver a sentir la picada de otro bonito róbalo me despido de vosotros hasta la próxima que espero sea pronto. Un saludo.